Prepárese para un recorrido inolvidable por la encantadora Polonia y la República Checa, con las impresionantes montañas de Krkonos como punto culminante. Esta ruta comienza en el pintoresco pueblo de Kapacz, donde le recibirá un bello entorno lleno de sorpresas.

La primera parada de esta ruta es el singular Chata na Głowie, una atracción inusual situada en Miłków, entre Karpacz y Jelenia Góra. A primera vista ves una casa, pero después de un momento de observación te das cuenta de que la casa está al revés. La vista desde el exterior ya es un verdadero atractivo, por no hablar de la entrada al interior.
En lugar de permanecer de pie en el suelo, nos situamos en el techo.
Este edificio único te permite experimentar la gravedad de una manera lúdica y es perfecto para tomar algunas fotos divertidas para comenzar el día.
En Sosnowska hay un aparcamiento desde donde se tiene una hermosa vista del lago Sosnowska.
Esta superficie de agua también se utiliza para agua potable en la región.
Desde este aparcamiento también se puede visitar el cercano castillo de Kziecia Henryka, pero habrá que caminar unos diez minutos para llegar al castillo.
Luego seguirás viajando y cruzarás la frontera hacia la República Checa y unos kilómetros más adelante llegarás a Horrachov, donde podrás disfrutar de una visita a una microcervecería.
Aquí tendrás la oportunidad de ver cómo se elaboran las cervezas locales y posiblemente comprarlas para degustarlas más tarde.
Para los verdaderos entusiastas, existe incluso la opción de tomar un baño de cerveza, que promete ser una experiencia única.
Junto a la cervecería se encuentra el Museo del Vidrio, donde podrás dejarte encantar por el arte del soplado de vidrio y aprender más sobre la fascinante historia de este oficio. Esta es definitivamente una visita obligada para los amantes del arte y ofrece una gran oportunidad para aprender más sobre esta técnica tradicional.

Finalmente, la ruta te lleva al moderno Spindleruv Mlyn, un pueblo de esquí turístico, donde tendrás la oportunidad de comer algo en los numerosos restaurantes y un poco más lejos puedes conducir hasta una alta meseta en las montañas Krkonoš, donde podrás disfrutar de la impresionante naturaleza y vistas espectaculares. Puedes realizar un pequeño paseo para sumergirte por completo en la belleza de las montañas.
Luego regresas para pasar nuevamente por Spindleruv Mlyn y te desvías justo antes del pueblo de Horejsi Vrchlabi para pasar algunos pasos de montaña y pequeños pueblos de esquí.
Ahora continuamos lentamente la ruta de regreso hacia Polonia. Por último, puedes hacer una pausa en Mala Upa, justo antes de cruzar la frontera hacia Polonia. En el lado polaco, las primeras curvas abren paso entre los árboles, regalándote, finalmente, otra hermosa vista de las montañas que te rodean. Lamentablemente no hay lugares de estacionamiento seguros aquí, así que busca un lugar seguro en el asfalto si quieres tomar una foto aquí.
Ahora volvemos al lado polaco a través de los Montes Gigantes, bajando por carreteras de montaña un poco hacia el norte. Al igual que la naturaleza, algunas ciudades de Polonia también son hermosas. Kowary, por ejemplo, tiene un centro urbano precioso, pero también su propio “Madurodam”. La ciudad cuenta con un modesto Parque en Miniatura donde se pueden contemplar diversos estilos arquitectónicos polacos. Dado que hoy se trata principalmente de una ruta para disfrutar de la conducción en la naturaleza, no he creado ninguna parada para ello en esta ruta. El waypoint está disponible, por lo que si aún así quieres visitar el parque en miniatura, la ruta pasará justo por allí.
Después de Kowary regresaremos a la ciudad de Karpacz y a nuestra base, el Sudecki Hotel Spa-Resort.